jueves, 6 de septiembre de 2007

Resuena tu voz desnuda


En el canto de mi memoria
Resuena tu voz desnuda
Tu ser no está aquí ahora
Vaga por esferas negras
Todo tu pasado es hoy
¿Mañana quién serás?

Son tantos los días
Sin la presencia de tu cuerpo
Extraño el hedor de las uvas
cuando empieza la primavera
sin soles verdaderos.

¿En qué lugar quedaron tus sueños?

Llora tu corazón doliente
Sigilosa me acerco a tu temblor naciente
Abrazo tu tristeza, abrigo la lágrima caída
del precipicio que vas creándote de a poco
Me pedís que no te deje ahora
pero a veces me despido
y al día siguiente llueve tu ser.

Y mi pecho de mujer desde sus entrañas
te provoca, te convoca
te abandona y te recibe.

Nuestro amor yace entre sábanas gastadas
de encuentros y despedidas.
Es el corazón el que no puede olvidar.

Viviana F. Pelle

7 comentarios:

Gustavo Tisocco dijo...

Bello poema Vivi, bellísimo posteo.
Un placer pasar por aquí.
Un abrazo Gus...

La Máquina de Escribir dijo...

Magníficos tus poemas como todo tu blog. Es un verdadero deleite recorrer la belleza de tu poesía en este sitio tan bien ambientado. Mis felicitaciones. Volveré.
Aníbal Jorge Sciorra (anisci)

Gustavo Tisocco dijo...

Vivi por ponerme los vínculos a mis blog.
Un abrazo enorme Gus...

jotate dijo...

En montevideo, a las 2 y cuarto de la mañana de un lunes leer y SENTIR tanta belleza...es gratificante..amar la generosidad de un creador de poesía es algo tan infrecuente por estos días, pero persistan por favor..de cuando en vez a alguien conmueven y algún espíritu compuesto de jirones siente bien nuevamente..gracias Viví

Elisabet Cincotta dijo...

Vivi, un hermoso blog y más bellos tus poemas que cantan a la vida, al amor, a la paz.
Un gusto visitarte.
Abrazos
Elisabet

Lidia Gaytán dijo...

Malo es lo del final, que el corazón no olvida. Bueno fuera que olvidara... bueno fuera. Aunque mm en algunas ocasiones es bonito los residuos que quedan, no?

Bonito texto.

Lidia Gaytán

viviana dijo...

Lidia, a veces el regocijo nos pone una trampa, es decir el sufrimento, quedamos atrapados allí, otras veces queda el recuerdo de algo bello, y eso pasa una sola vez en la vida. Gracias Gus, gracias Elizabeth por tu comentario, gracias Aníbal por visitarme, gracias Jotate de Montevideo, mis cariños a todos.